La Finca El Retamar acogió a esta fantástica pareja en uno de los días más importantes de su vida. En ella se vivieron momentos de alegría, de emoción y también de diversión. Una celebración por todo lo alto en la que ellos fueron los protagonistas.
Como fotógrafos, fuimos un poco más allá. Parece que queda lejos ya el momento en el que nos conocimos por primera vez. Aquel primer contacto en el que les enseñamos forma de trabajar. Aquellas primeras cañas que se acumulaban en nuestra mesa. Quizás hayamos vivido esta boda de una manera especial gracias a la forma de ser de Fernando y Noelia. Nos demostraron confianza y hemos tratado de devolvérsela en forma de trabajo.
Gracias por permitirnos estar ahí, por darnos la oportunidad de captar vuestro amor, el de vuestra familia y amigos. Pero no me quiero enrollar más, que aquí habéis venido a ver unas fotillos de la boda.
¡Pues aquí están! ¡Disfrutadlas!