Queda menos de un mes para el enlace de esta pareja y no puedo estar con más ganas. Tanto es así, que he querido mostrar alguna de las fotografías que hicimos en su preboda en Malasaña y las calles de Madrid.
Como es lógico estuvieron algo más nerviosos al principio, pero tardaron muy poquito en disfrutar del tiempo juntos. Y ahí es donde está la magia. Lo que hace diferente cada fotografía es la manera de ser de la pareja. Su interacción en ese momento es única. ¿Qué se estarían diciendo para tener esa expresión risueña y a la vez tan tierna? No lo sé, pero seguro que ellos sí lo recuerdan.
Ahora ya, la siguiente fecha, es la de su boda. Y allí estaré, cámara en mano, para captar estos momentos de complicidad