Juan Francisco y Carolina decidieron que su preboda fuera por las calles de Toledo, aún engalanada para la fiesta del Corpus. Pero esta sesión contó con dos magníficas y colaborativas invitadas. Las pequeñas de la familia fueron partícipes y grandes protagonistas de muchas de las fotografías. Aunque si queréis verlas se lo tendréis que pedir a ellos, claro. Para nosotros fue un auténtico placer compartir esta magnífica experiencia junto a todos ellos. Y nos lo pasamos genial, como de costumbre.
El resultado que os mostramos en la siguiente galería demuestra la alegría que transmiten y la naturalidad de Juan y Carolina. En nada estaremos junto a ellos para captar los mejores momentos del día de su boda.