Hacer fotografías es algo bonito y hoy, al alcance de casi todos. En cambio, trabajar como fotógrafo es una gran responsabilidad.
Siempre me recuerdo que hay algo imprescindible en mi fotografía: los momentos. Hay que dejar que las cosas pasen y estar atento. Para eso, nada mejor que ayudar a las personas a ser ellas mismas delante de la cámara. Recuerda que el tiempo pasa y una de las pocas formas de conservar esos instantes junto a nuestros seres queridos es a través de la fotografía.
Gracias a Vera y a su familia por hacerlo tan fácil. Por hacerme disfrutar de mi trabajo y por la confianza que han puesto en mí.