Černý vivió el periodo del paso de los regímenes comunistas autoritarios que habían dominado el país durante la guerra fría a la “revolución de terciopelo”. Este periodo supuso grandes transformaciones sociales por lo que algunas de sus obras representan una crítica social.
Son varias obras las que podemos encontrar por la ciudad.:
Ésta última se trata de dos esculturas de más de dos metros que mueven su pene arriba y abajo y la parte del cuerpo a la derecha y a la izquierda. De esta forma, orinan en una piscina con la forma de la República Checa y, con sus chorros, van dibujando frases de personajes checos famosos.