Bienvenido de nuevo a un nuevo post sobre la Historia de la Fotografía. Esta semana quizás te traiga uno de los artículos más importantes hasta ahora y quizás no lo creas así, pero gran parte de la teoría para aprender fotografía surge del estudio de la luz. Por ello las investigaciones de Hurter & Driffield sobre sensitometría son fundamentales. Acompáñame y deja que te cuente más cosas.
Un actinógrafo es un instrumento para medir o estimar la cantidad de luz disponible, en relación con su capacidad para exponer una película fotográfica. Esto es, mide la intensidad actínica (o química) de la luz, en oposición con el volumen fotométrico de luz.
Los primeros actinógrafos eran dispositivos que funcionaban de forma continua durante 24 horas. Para ello utilizaban un cilindro de papel fotográfico, rotado mediante un mecanismo de relojería, expuesto a la luz mediante una ranura en forma de cuña. Gracias a esto se registraba una gráfica de la intensidad actínica de la luz durante el periodo de un día.
En 1888, Ferdinand Hurter y Vero Charles Driffield patentaron un dispositivo para estimar la potencia actínica del sol. Estaba diseñado con el propósito de poder ajustar adecuadamente los tiempos de exposición y las aperturas de las cámaras fotográficas, basándose en la sensibilidad de la película, hora del día, época del año, y latitud. Estos dispositivos eran unas reglas de cálculo (y no instrumentos de medición), por lo que no producían gráficos, aunque Hurter y Driffield adoptaron el mismo nombre.
La sensitometría es el estudio científico de los materiales fotosensibles, especialmente de las películas fotográficas. Esta técnica tiene sus orígenes en el trabajo desarrollado por Ferdinand Hurter y Vero Charles Driffield (hacia 1876) con algunas de las primeras emulsiones fotosensibles en blanco y negro. Determinaron cómo la variación de la densidad de partículas de plata producidas variaba con la cantidad de luz recibida, desarrollando la metodología del proceso del revelado fotográfico.
Dicho de otra manera, conocer la sensitometría te otorgará el control total sobre los tonos de tu fotografía. Porque aquí un secreto: es válida tanto para el analógico, como para el digital. Y ya sabes que, tener el control de algo te permitirá poder conseguir cualquier resultado.
Quizás el post de hoy se me quede corto comparado con otros al hablar de Historia de la Fotografía. Y es sólo por un motivo. Porque antes de entrar en profundidad en la sensitometría habrías de conocer otros conceptos importantes. Bueno, y para ser sinceros, porque después de escribirlos me decidí a borrarlos para no hacerte tan tedioso este artículo. Quizás sea un buen momento para plantearme escribir algún artículos sobre teoría fotográfica que puedan guiarte de manera más eficiente para conocer diferentes procesos de la captura y revelado fotográfico.
Así que mientras si me decido a hacerlo o no (porque lleva mucho tiempo y dedicación para preparar material de calidad) te espero la semana que viene con una nueva entrada. Tan sólo disfruta de estos días hasta el próximo martes. Nos vemos.